VÍDEOS DE LA BODA
Ona y Roger, dos jóvenes muy jóvenes, dos enamorados, muy enamorados.
Cuando estás grabando una ceremonia y el visor se nubla es por qué algo emocionante pasa delante de la cámara. Hay miradas que hablan por sí solas, y no es solo una bonita afirmación. Cuando vemos parejas que se quieren, que les ves que se quieren, que lo respiran, que lo transmiten, que sienten y se concentra todo en unos instantes es un placer ser testigo de esos momentos.
Nos emociona y nos hace muy felices cuando vemos una pareja que se están comprometiendo y lo hacen de todo corazón. Hacer un vídeo sobre esos momentos es muy emocionante.
Así que Ona y Roger nos dejan eso en tan sólo un día: el amor verdadero, en un discurso que deja sin palabras, en un piano que suena, entre teclas nerviosas, pero suena, dejando una noche inolvidable, con sorpresas, invitados entregados, detalles que se recordarán para siempre.